COMPRESION DE LA MEDULA ESPINAL Y SU TRATAMIENTO HOMEOPATICO

Dra. Sandra Liliana Obando Toloza, medica veterinaria homeópata, UDCA. FICH. Directora de la clínica veterinaria animals planet -Bogota. Colombia. Animalsplant2000@hotmail.com.

RESUMEN

 

El cordón espinal esta formado por muchas fibras nerviosas, quienes trasportan mensajes del cerebro a diferentes partes del cuerpo; su lenguaje es claro y se relaciona con el movimiento; el tacto produce sensaciones de dolor o placer pues este está irrigado por vasos, nervios y demás.

Debido a que la médula espinal es una parte vital del  sistema nervioso, está rodeado y protegido por las vértebras, están colocadas una arriba de la otra formando la columna vertebral o la columna espinal siendo esta  el soporte número uno del cuerpo. La médula espinal realmente pasa por en medio de las vértebras.

En la mayoría de las lesiones medulares, la dura y la aracnoides permanecen intactas. Las arterias espinales anterior y posterior usualmente son respetadas. Sin embargo, aun con grados moderados de trauma, pequeños vasos intramedulares pueden ser lesionados, lo cual produce hemorragia y lesión tisular; la disrupción traumática de estos vasos produce disminución del flujo tisular, lo cual conduce a necrosis hemorrágica de la sustancia gris central y a cambios vasculares y quísticos que se extienden a la sustancia blanca. Las alteraciones ultra estructurales consisten en la apertura de las pequeñas uniones del endotelio vascular, separación del endotelio de su membrana basal y acumulación de numerosos trombos de plaquetas.

Las características del trauma son multifacéticas y se pueden relacionar con los siguientes cuatro aspectos:

  1. cambios morfológicos de la médula
  2. hemorragia y daño vascular
  3. cambios estructurales en la sustancia gris y blanca
  4. respuesta bioquímica secundaria al trauma.
  1. los cambios patológicos primarios son secundarios a      una alteración de la microcirculación
  2. puede ocurrir alguna reacción metabólica lesiva      después del trauma.

Una lesión de la médula espinal puede ocurrir debido a una lastimadura o daño debido a una enfermedad de la columna vertebral o la médula espinal. En la mayoría de las lesiones de la médula espinal, los huesos de la espalda o vértebras pellizcan la médula espinal. La médula espinal puede inflamarse. La lesión en realidad puede desgarrar el cordón espinal y/o sus fibras nerviosas. Una enfermedad o infección puede causar resultados similares.

Después de una lesión en la médula espinal, todos los nervios por arriba del nivel de la lesión continúan funcionando normalmente. Por abajo del nivel de la lesión, los nervios de la médula espinal no pueden enviar mensajes entre el cerebro y las diferentes partes del cuerpo tal y como lo hacían antes de la lesión. Cada lesión de la médula espinal es diferente.

En la clínica veterinaria hoy día se reciben como urgencias un número de pacientes lesionados por atropellamiento vehicular, caídos de grandes alturas, y/o enfermedades degenerativas ya sea por edad o predisposición por algunos de sus componentes de la estructura esquelética.

Su manejo es difícil y las  técnicas quirúrgicas no ofrecen la total o parcial recuperación del paciente,  la descompresión medular(quirúrgica) es un riesgo que hay que tomar después de ayudar al paciente a la desinflamación del cordón medular con fármacos, el trauma produce un efecto dolor en cadena comprimiendo el condón espinal y produciendo un sin numero de reacciones, la homeopatía es una buena opción, su manejo es  menos traumática y nada invasiva, las complicaciones en la consulta por antecedentes de intolerancia a los medicamentos , a los riesgos de la anestesia y al costo de las cirugías de este tipo dan al propietario por tomar la decisión de eutanasiar a su mascota al no poder encontrar una respuesta a un tipo de patología difícil de manejar para el clínico, si su manejo es el adecuado y la prescripción es precisa podremos tener una buena respuesta de parte del paciente, he puesto a disposición de ustedes algunos casos  reportados hasta la fecha.

Con homeopatía se han atendido, caninos, felinos y roedores quienes han mostrado una buena respuesta a la medicación. Su manejo ha sido externo, sin hospitalización y con recomendaciones de fisioterapia adecuadas a las lesiones, el manejo de la desinflamación es inmediato y se alterna con el medicamento de base a la repertorización característica de este (simillium). Se hacen controles a las 48 horas, 8 días, 15 días y 30 días. Hasta el momento no hemos tenido que cambiar la medicación inicial, solo hemos manejado la frecuencia de la toma del remedio según sea el caso inicial por agudo, e ir espaciando a medida que haya notoria mejoría del paciente. Con esto queremos alentar a nuestros propietarios y colegas a utilizar la homeopatía en este tipo de patología.

REFERENCIAS